3-6-2010 - La presidenta relativizó hoy la independencia absoluta del Banco Central, en un acto que conmemoró el 75 aniversario de la entidad monetaria. Allí lanzó las nuevas monedas para celebrar el Bicentanrio, de 1 peso, que tendrán curso legal.
La presidenta Cristina Kirchner relativizó hoy la autonomía absoluta del Banco Central y afirmó que la política de la autoridad monetaria debe estar en sintonía con la marcada por el Poder Ejecutivo, generando un nuevo capítulo en la disputa que la enfrentó con el ex titular de la entidad, Martín Redrado.
Asimismo, aseguró que es necesario "rediseñar una nueva arquitectura financiera global", criticó el actual funcionamiento de las Naciones Unidas (ONU) y del Fondo Monetario Internacional (FMI) y reivindicó el rol del Estado como agente para regular las imposiciones de los mercados y generar mayor igualdad en la sociedad. La mandataria habló esta tarde en el Salón Bosch del Banco Central de la República Argentina al inaugurar el seminario con el que la autoridad monetaria celebró su 75 aniversario.
Esta fue la primera visita de la jefa de Estado a la entidad rectora del sistema financiero tras la crisis que se produjo con Redrado.
Cristina defendió la posición adoptada por el Gobierno en relación a la salida de Redrado y la asunción de Mercedes Marcó del Pont al frente del BCRA al sostener que la entidad debe estar en línea con el proyecto político del Gobierno.
"Alguien cree en serio que el titular de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Ben Bernanke) hace lo que le parece o hace lo que le conviene a los Estados Unidos", dijo Fernández para ejemplificar su postura. "En toda esta teoría que se exhibió (sobre la autonomía) hubo quien se la creyó en serio y hay quien hace que se la cree", insistió la mandataria.
La presidenta se preguntó "si la autonomía es tal, que el presidente del Banco Central no tiene nada que ver con el proyecto político del gobierno". Y enseguida se contestó: "Nadie puede creer en esa cosas. Sólo lo podemos repetirlo por liturgia aquí en la Argentina".
La mandataria afirmó que es necesario rediseñar la "arquitectura financiera global" porque instituciones como el FMI y Naciones Unidas "no funcionan".
Al respecto adelantó que esta será la postura que la Argentina llevará a la próxima reunión del G-20 que se desarrollará en Toronto, Canadá.
"El liberalismo más acérrimo también mostró su fracaso", enfatizó la presidenta y consideró la necesidad de un nuevo orden financiero internacional que aún se basa en instituciones que fueron creados a la luz de los resultados que se produjeron tras la segunda guerra mundial.
Indicó que en ese orden "se impone el más crudo darwinismo" y para ofrecer una imagen contó que sus dos perras bóxer han tenido 11 cachorros y que los más fuertes se pueden alimentar y desplazan a los más débiles. Fernández también se refirió a la crisis financiera europea y señaló que los mayores embates los están recibiendo los países con gobiernos socialistas.
Aunque aclaró que "no iba a nombrarlos", sostuvo que "hay otro país que está comprometida su situación el doble y no se lo menciona ni se le pide ajuste".
"Yo no creo en las brujas, pero que las hay las hay", recalcó. En consecuencia, afirmó que existe un "doble standard" para "aplicar la receta de turno, según de que país se trate".
También indicó que durante la reunión de G-20 pedirá que se "tome el toro por las astas" en torno a los paraísos fiscales.
http://www.ieco.clarin.com
La presidenta Cristina Kirchner relativizó hoy la autonomía absoluta del Banco Central y afirmó que la política de la autoridad monetaria debe estar en sintonía con la marcada por el Poder Ejecutivo, generando un nuevo capítulo en la disputa que la enfrentó con el ex titular de la entidad, Martín Redrado.
Asimismo, aseguró que es necesario "rediseñar una nueva arquitectura financiera global", criticó el actual funcionamiento de las Naciones Unidas (ONU) y del Fondo Monetario Internacional (FMI) y reivindicó el rol del Estado como agente para regular las imposiciones de los mercados y generar mayor igualdad en la sociedad. La mandataria habló esta tarde en el Salón Bosch del Banco Central de la República Argentina al inaugurar el seminario con el que la autoridad monetaria celebró su 75 aniversario.
Esta fue la primera visita de la jefa de Estado a la entidad rectora del sistema financiero tras la crisis que se produjo con Redrado.
Cristina defendió la posición adoptada por el Gobierno en relación a la salida de Redrado y la asunción de Mercedes Marcó del Pont al frente del BCRA al sostener que la entidad debe estar en línea con el proyecto político del Gobierno.
"Alguien cree en serio que el titular de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Ben Bernanke) hace lo que le parece o hace lo que le conviene a los Estados Unidos", dijo Fernández para ejemplificar su postura. "En toda esta teoría que se exhibió (sobre la autonomía) hubo quien se la creyó en serio y hay quien hace que se la cree", insistió la mandataria.
La presidenta se preguntó "si la autonomía es tal, que el presidente del Banco Central no tiene nada que ver con el proyecto político del gobierno". Y enseguida se contestó: "Nadie puede creer en esa cosas. Sólo lo podemos repetirlo por liturgia aquí en la Argentina".
La mandataria afirmó que es necesario rediseñar la "arquitectura financiera global" porque instituciones como el FMI y Naciones Unidas "no funcionan".
Al respecto adelantó que esta será la postura que la Argentina llevará a la próxima reunión del G-20 que se desarrollará en Toronto, Canadá.
"El liberalismo más acérrimo también mostró su fracaso", enfatizó la presidenta y consideró la necesidad de un nuevo orden financiero internacional que aún se basa en instituciones que fueron creados a la luz de los resultados que se produjeron tras la segunda guerra mundial.
Indicó que en ese orden "se impone el más crudo darwinismo" y para ofrecer una imagen contó que sus dos perras bóxer han tenido 11 cachorros y que los más fuertes se pueden alimentar y desplazan a los más débiles. Fernández también se refirió a la crisis financiera europea y señaló que los mayores embates los están recibiendo los países con gobiernos socialistas.
Aunque aclaró que "no iba a nombrarlos", sostuvo que "hay otro país que está comprometida su situación el doble y no se lo menciona ni se le pide ajuste".
"Yo no creo en las brujas, pero que las hay las hay", recalcó. En consecuencia, afirmó que existe un "doble standard" para "aplicar la receta de turno, según de que país se trate".
También indicó que durante la reunión de G-20 pedirá que se "tome el toro por las astas" en torno a los paraísos fiscales.
http://www.ieco.clarin.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
No insultos, No palabras obsenas, NO razismo