17-8-2010 - Con frecuencia escuchamos sobre estas verdades aparentes. Pero resultan muy cuestionables:
1. Tenemos que ir a la Universidad. Nadie puede negar la importancia de la educación, pero a veces esperamos más de la educación. No por tener muchos títulos vamos a obtener un mejor trabajo o un mejor ingreso. En el mundo real lo que al final importa mucho mas que la formación universitaria es la capacidad de generar valor. Es decir, A la hora de la verdad lo que importa es cuánto dinero es capaz de generar una persona? Por ello es que en las entrevistas de trabajo es tan importante demostrar la capacidad que una persona tiene de generar ingresos. Además, eso es lo único que vale cuando eres empresario. Nadie va a comprar tu producto porque tienes un título o un Phd de la Universidad más prestigiosa.
2. Ser empresario es el mejor camino para el éxito financiero. Es un camino bueno y válido, pero no es el único. Hay muchos empleados ejecutivos que ganan mucho más dinero que muchos empresarios y no asumen el riesgo ni los dolores de cabeza de ser empresarios.
3. La deuda es mala. No siempre. Si solo te endeudas para hacer compras y viajes de vacaciones, puede ser mala decisión. Pero si tomas un préstamo para crear un negocio o invertir en un activo que genera dinero y paga la deuda, la respuesta es que es una deuda muy buena.
4. Comprar casa es la mejor decisión de una familia. En situaciones como la actual seguir pagando renta y ahorrar dinero puede ser más rentable que comprar una casa. Además, cuando acabes de pagar tu casa en 20 o 30 años seguirás pagando impuestos.
5. Hay que jubilarse entre los 60 y 65 años.¿Por qué? Cada persona debe elegir la edad de jubilación que más le convenga. Si tu salud no se deteriora y te gusta mucho tu trabajo no debe ser una obligación jubilarse. Todos queremos seguir siendo útiles. Y de paso ganamos más dinero.
6. Las mujeres se jubilan antes que los hombres. ¿Por qué? si estadísticamente está demostrado que las mujeres viven más tiempo que los hombres.
7. Los niños nacen con un pan bajo el brazo. Nunca he visto que eso ocurra. Por lo general nacen y los gastos del hogar se multiplican y siguen creciendo a medida que los hijos crecen.
8. No se puede ahorrar dinero bajo el colchón. Con la desconfianza que se han ganado los bancos después de sus dudosos manejos en la crisis financiera de finales de 2008 es comprensible que muchos se sientan más seguros con su dinero muy bien guardadito en casa.
9. Hay que ahorrar para la educación de los hijos. ¿No será mejor que ellos se ganen las becas y busquen las opciones necesarias para financiar su educación sin gastarse lo que los padres han ahorrado para jubilarse?
10. Hay que trabajar mucho. ¿No será mejor trabajar de forma inteligente? Si tenemos que trabajar en exceso es porque algo no está funcionando. Es necesario trabajar para vivir y no lo contrario. Esa una lógica simple.
Por Jaime Mejia - http://dinero.aol.com
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